Una camilla eléctrica ajustable le permite trabajar más cómodamente porque la altura de ésta es básica para evitar lesiones en el terapeuta, eligiendo nuestra camilla eléctrica usted puede ajustarla independientemente del volumen del paciente.

La altura de la camilla debe llegar a la articulación de la cadera del terapeuta y así le proporciona un trabajo con mayor fluidez y con menor gasto energético.
Además, puede aplicar la terapia con un brazo de palanca óptimo para realizar tratamientos de estiramiento, fortalecimiento manual y sobre todo masaje.
Al trabajar con una menor contracción isométrica de los músculos del tronco se mantiene una buena postura muscular e higiene de columna favoreciendo una fuerza muscular adecuada, de esta forma se evitan las lesiones de espalda como las algias vertebrales por sobre esfuerzo.
La estabilidad es una de las características más importantes, está diseñada para permitir cambios de altura utilizando un pedal que evita movimientos bruscos que en ocasiones pueden marear o asustar al paciente, haciendo que éste se sienta cómodo y seguro.